Se introdujo en 1970 pensando en industrias que requerían una alta resistencia a la corrosión, ya que el ECTFE es especialmente resistente a altas concentraciones de ácidos, agentes cáusticos, agentes oxidantes y multitud de solventes. Por ello, Coatresa aplica Halar® para el sector químico, gracias a su baja permeabilidad y gran resistencia a la abrasión, en valvulería, reactores, conductos, etc.

Además de su notable resistencia química, el Halar® destaca por su gran resistencia térmica, ya que mantiene sus propiedades en ambientes de –76°C a +150°C. Además no es inflamable. Muchos cables también se recubren con Halar® porque ofrece una baja constante dieléctrica que lo hace ideal para los sectores de las telecomunicaciones y de la microelectrónica.

Su alta resistencia a la fricción ayuda a reducir el desgaste de piezas móviles muy exigentes, como engranajes y partes incluidas en dispositivos mecánicos de gran estrés.